Una gestión adecuada del proyecto requiere una importante labor de coordinación, sincronización y transparencia en las diferentes actividades. Esta tarea de gestión deberá preocuparse no sólo de la coordinación de los aspectos técnicos, sino también de supervisar que la planificación del proyecto se lleve a cabo dentro de las previsiones, y asegurar un nivel de comunicación adecuado entre los diferentes subproyectos, además de garantizar la organización de las pertinentes reuniones de proyecto.